Atrás quedaron los días en los que prácticamente todas las personas querían tener una voz rasposa. A finales de los 60 y también en los 70, casi todos los vocalistas de rock tenían una voz rasposa. Mick Jagger, el vocalista de Rolling Stones, Robert Plant de Led Zeppelin, e inclusive Rod Stewart ilustraron la hermosura de tener una voz raspos